MI BLOG DE COCINA

viernes, 10 de septiembre de 2010

EL FUEGO PURIFICADOR

Hola:

Para que no haya malos entendidos a la hora de leer este artículo tengo que comenzar diciendo que voy a usar el término “El Hombre” (con H mayúscula) para referirme al conjunto de la categoría animal “bípedo sin plumas”. Me niego a usar la palabra “Humanidad”, ya veréis porque.

Cada vez estoy más convencido de que la presunta racionalidad del ser humano es una patraña. Cada minuto que va pasando tengo más claro que “El Hombre” es uno de los animales con menos raciocinio de todos los que pueblan nuestro sufrido planeta. Cada día siento más vergüenza de pertenecer a la especie “Homo Sapiens” (*) que es “sapiens” solo porque sabe, mejor que otros mamíferos, como hacer daño a sus semejantes.

Seguro que alguien está pensado: “¡Vaya rebote que ha cogido Esteban! ¿Qué le habrá pasado?”. Pues no ha pasado nada que no haya pasado antes, y me explico: supongo que todos estás al tanto de la famosa “Quema de Coranes” que tiene pensado hacer un pastor de Florida ¿verdad?, pues de ahí viene mi cabreo.

Estoy harto de salvadores mesiánicos. Estoy hasta el gorro de provocadores inconscientes. Estoy hasta “las mismísimas” de fundamentalistas (de uno y de otro signo). No entiendo a los que se dedican a quemar libros pero tampoco entiendo a los que sacralizan un legajo de papel hasta el punto de matar o morir por ello. Que conste en acta que siento lo mismo cuando, en vez de libros, se queman banderas que (me cuenten lo que me cuenten) no son más que trozos de tela colgados en un mástil mas o menos alto.

Si alguien quema libros lo que había que hacer es detenerle por contaminar el medio ambiente y tratar de reeducar su estulticia y estupidez. Pero pensar que, por una resma de celulosa convertida en cenizas, es lícito matar o morir me parece mucho más grave.

Creo que ya he usado alguna vez la famosa frase de Lord Byron “Cuanto más conozco a los hombres más quiero a mi perro” pero, esta vez, esta vez me viene como anillo al dedo.

Quizás, en vez de libros, debiéramos quemar nuestros prejuicios, convencionalismos, religiones, creencias, ideas, en fin, todo lo que nos sobra, y dejar que el fuego purificador borre lo viejo y nos permita renacer límpios y puros, otra vez.

Un abrazo “verdaderamente enfadado”,

Esteban

(*) CLASIFICACIÓN TAXÓNOMICA DEL SER HUMANO (SEGÚN Linneo)

Reino: Animalia
  Organismos heterótrofos eucariotas sin pared celular y pluricelulares.
Phylum: Chordata
  Organismos, primitivamente, con notocorda.
Clase: Mammalia
  Organismos con glándulas mamarias, funcionales en las hembras, que secretan leche para la 
  nutrición de la cria. Homeotermos y con pelo.
Orden: Primates
  Ojos frontales, pulgar oponible.
Familia: Hominidae
  Cerebro desarrollado y con neocórtex, visión estereoscópica.
Género: Homo
  Espina dorsal curvada, posición bípeda permanente.
Especie: Homo sapiens
  Huesos craneales delgados, capacidad vocalizadora.